
Hormigón para escaleras
Construir una escalera de hormigón, tanto en interiores como exteriores, es una solución práctica, económica y que nos permite disfrutar de las ventajas de este material frente a otros. En este artículo, te explicamos, peldaño a peldaño, porque decidirte por el hormigón como material para tus escaleras y cómo debes construirla.
Ventajas de una escalera de hormigón
Frente a otros materiales como la madera, el hormigón nos aporta unas ventajas estructurales y de duración superiores. Todo ello, sin renunciar al toque estético y la versatilidad de diseño que nos puede dar. Vamos a repasar los motivos por los que tienes que construir tus peldaños con hormigón.

- Resistencia estructural y durabilidad: El hormigón puede soportar cargas pesadas y un uso intensivo sin deformarse. Va a tener más aguante que casi ningún otro material. No se pudre, no se deforma y resiste a la humedad. Tu escalera de hormigón estará lista para durar décadas.
- Bajo mantenimiento: Una escalera de hormigón no necesita apenas mantenimiento. No tendremos que cambiar listones como si fuese madera o realizar reparaciones y chequeos como ocurre con las de metal.
- Versatilidad estructural: ¿Quieres una escalera de hormigón de caracol, una recta o necesitas peldaños de hormigón suspendido? No te preocupes, las escaleras de hormigón se adaptan a cualquier forma o diseño, gracias a la trabajabilidad de este material.
- Estética: Tienes múltiples acabados muy estéticos. Puedes construir una escalera de hormigón pulido, una escalera de hormigón visto, entre otras muchas opciones. Asimismo, el hormigón no tiene por qué ser gris, en hormigon.es nuestro equipo está listo para ofrecerte una amplia gama de colores entre los que elegir.
- Construcción o prefabricadas: Puedes construir una escalera de hormigón de obra, ya sea tú mismo o contando con profesionales, o puedes contar con un modelo prefabricado que solo necesita ser instalado en tu construcción.
Claves para la mezcla de una escalera de hormigón
A la hora de elegir la mezcla del hormigón para nuestra escalera, lo primero que tenemos que tener en cuenta es su resistencia. Tiene que ser un hormigón C25 o C30 como mínimo. Es decir, un hormigón con una alta resistencia, capaz de soportar tráfico intenso y cargas pesadas.
Asimismo, nuestra escalera de hormigón debe tener una baja relación agua/cemento, para evitar la aparición de fisuras o que sea poroso. Esto último es especialmente importante en escaleras exteriores, donde además sería interesante aplicar aditivos plastificantes o impermeabilizantes para su protección.
Para asegurar la estructura, la escalera de hormigón debería contar con un armado metálico. Tanto los peldaños de hormigón de obra, como las estructuras prefabricadas suelen incorporar un mallazo de acero. Es normal, piensa que las escaleras, especialmente las que están suspendidas, tienen que soportar mucho peso en una zona crítica.
Por último, tendremos que valorar el acabado de nuestra escalera de hormigón para evitar resbalones. Si está en exterior, optaremos por una escalera de hormigón visto, cepillado o punteado. En los espacios interiores, podremos construir una escalera de hormigón pulido, al que siempre puedes añadir algún tratamiento antideslizante para evitar resbalones.
En definitiva, tanto si es una escalera exterior como interior, el hormigón es un gran material para construir tus peldaños. No dudes en consultar nuestras guías sobre cómo trabajar con el hormigón o consultar con nuestro equipo las dudas que te puedan surgir durante el diseño o construcción de tu escalera de hormigón.