¿Se pueden hacer piscinas de hormigón?

Cuando pensamos en los materiales de una piscina, la mayoría de las personas tenemos en mente los clásicos azulejos azules. Sin embargo, se pueden construir piscinas de hormigón y aprovechar muchas de las cualidades de este material en nuestros chapuzones veraniegos.

El hormigón para una piscina gunitada se elabora con una fórmula específica, distinta del hormigón que se usa en otras aplicaciones como la estructural o el bricolaje. Ha de usar un árido fino, inferior a 8 mm. Ha de ser un hormigón muy resistente, con muy poca mezcla de agua. Asimismo, el hormigón para piscina no debe ser muy poroso para evitar filtraciones y puede incorporar aditivos plastificantes, acelerantes o impermeabilizantes.

Este proceso requiere de maquinaria especializada y una mezcla con alta calidad. Sin embargo, si estás pensando en tu próximo chapuzón en una piscina de hormigón, no dudes en consultar a los expertos de hormigon.es para que te guíen y te cuenten como podemos ayudarte a construir tu piscina gunitada.

Gunitado de piscinas

Las piscinas de hormigón se construyen con un proceso conocido como gunitado. Durante el mismo, se proyecta hormigón a presión en un molde o encofrado. Se utiliza una manguera con una boquilla especial para poder proyectar el hormigón para la piscina. Al lanzarse a presión, el hormigón sale a una alta velocidad y choca con la superficie, compactándose al instante. Las piscinas de hormigón suelen tener un espesor de 3 cm en sus paredes.

Existen dos tipos de forma de hacer una piscina gunitada. El primero es la vía seca, en la que la mezcla viaja en seco por la bomba y se mezcla con el agua justo en la boquilla. Es la más usada y la más tradicional.

La otra opción es la vía húmeda. En esta técnica, el hormigón se mezcla previamente con agua y se bombea ya preparado hasta la boquilla. Es un proceso más moderno y limpio, pero requiere una bomba especial.

Ambos procesos requieren un conocimiento técnico avanzado y una instalación previa de la estructura de acero y los componentes hidráulicos y eléctricos de las piscinas. Te lo detallamos a continuación.

¿Qué hay que preparar antes del gunitado de piscinas?

Generalmente, el hormigón se proyecta sobre una armadura de acero previamente instalada con un mallazo. Esta armadura es la que ayudará a nuestra piscina de hormigón a soportar la presión del agua. La estructura se coloca sobre una excavación realizada previamente en la ubicación donde queremos nuestra piscina.

Antes de instalar la estructura de acero, hay que colocar toda la instalación hidráulica de la piscina: tuberías de impulsión, retorno, rebosaderos, focos, etc. Todo debe quedar anclado perfectamente y debe estar listo antes del gunitado.

Ventajas de una piscina gunitada

Te estarás preguntando cuál es la ventaja de realizar un proceso técnico complicado como el gunitado de piscina. Aquí te las detallamos:

  • Sin juntas: Las piscinas gunitadas te permiten contar con un vaso sin juntas entre las paredes y el fondo. Un vaso compacto y sin fisuras con las que evitar cualquier clase de pérdida.
  • Proceso rápido: Es un proceso veloz, que un equipo técnico bien preparado no debe tardar más de un día en instalártelo.
  • Alta resistencia: El hormigón se proyecta a presión, lo que mejora su compactación y solidez frente a sistemas como bloques o paneles.
  • Bajo mantenimiento: Mucho menos mantenimiento que otros materiales que necesitan vigilar las juntas. Soporta movimientos de terreno y la presión del agua durante años.
  • Versatilidad de diseño y acabados: El hormigón en piscinas te va a permitir consturir el vaso como tu quieras; con una forma redonda, con escalones... No existen límites. Además, podrás aplicar diferentes acabados a la superficie e, incluso, instalar hormigón de colores.
  • Más precio, mejor inversión: El costo inicial es más alto que otros materiales, pero su durabilidad y bajo mantenimiento hace que en el largo plazo vayas a ahorrar mucho más dinero.